Tipos y usos de balas para caza en España
En España residen un gran número de apasionados al mundo de la caza. Estos amantes de la cacería deben conocer los factores indispensables que se deben cumplir y que están registrados en la normativa
En España residen un gran número de apasionados al mundo de la caza. Estos amantes de la cacería deben conocer los factores indispensables que se deben cumplir y que están registrados en la normativa de control de armas de fuego y el reglamento pertinente a la caza.
En este mismo conjunto de normas especializadas, incluyen las diferencias y matices en función de las modalidades, ya sea caza mayor o menos, y formas de practicar la cacería en el territorio español.
A continuación vamos a contar en este artículo cómo se debe de emplear la balística de tu arma según si practicas la caza mayor o menor, y qué tipos de balas se pueden emplear en España.
Los usos según el tipo de caza
Saber que tipo de balas debes usar cuando vas de caza es muy importante, pues dependiendo si se escoge unas u otras, determinará el uso de arma de fuego.
Las piezas grandes de la caza mayor, se deben de emplear rifles de calibres medios (entre 7 y 8 mm) y balas semiblindadas. Pero para un mayor resultado, lo ideal es combinarlo con balas de expansión controlada.
En la caza más ligera o menor, como puede ser el caso del corzo, los calibres de 7 mm y proyectiles de expansión rápidas tienen la clave para tener un buen coeficiente balístico y un tiro certero para la caza.
Para la montería y los casos de caza de jabalí, se deben usar armas de características especiales como el calibre más grande. En ambos casos mencionados para el uso de la caza española, se deberían realizar tiros desde muy corta distancia con balas de expansión controlada y calibres pequeños.
¿Cuáles son los tipos de balas para cazar en España?
La munición que se encontraba en las armerías era de pólvora negra con capacidad para disparar proyectiles de plomo. El resultado del disparo dependía de la eficacia del calibre de la bala y el arma.
Hoy en día, el mundo de la caza es muy amplio, lo que ha llevado a contar con una gran variedad de usos de las armas especializadas. En él existen muchas técnicas, variedades y formas de cazar, ya sea en la caza mayor o menor.
En cada una de ellas se emplea un tipo de arma y bala, con el fin de poder alcanzar a la presa dependiendo de su tipo de caza.
Balas con pólvora sin humo: cambio de balística
Existen muchas diferencias en los métodos y usos de balas en la caza antigua y la caza actual. Un ejemplo de ello son las balas. En los primeros modelos de estas armas eran de pólvora negra y plomo, que estaban determinadas por la calidad de múltiples factores, pero hoy en día la situación ha ido cambiando, y mejorando la usabilidad, y sobre todo, la seguridad de estos elementos de caza.
Balas blindadas
Las balas actuales están pensadas para que tengan un pequeño componente de plomo, con el fin de encontrar la mejora perfecta en comparación con las balas que se empleaban en el pasado. Además de esta forma más moderna, el recubrimiento de las mismas balas está realizado con otro tipo de metal diferente al plomo y así evitar cualquier tipo de error que ocurriera en el pasado, y es a partir de estas modificaciones que aparecieron las balas blindadas.
Otro de los usos que se deben de cuidar es en la caza mayor con presas más grandes y resistentes, como los jabalíes. Para este tipo de piezas se necesitan proyectiles especiales ya que pues son presas que requieren de un tratamiento específico en su caza.
Es a partir de aquí, y por estas razones, por las que se debe prestar gran importancia a la energía que transfiere un arma en el momento de la actividad de caza. Conocer el impacto de la bala y saber mejorar el uso es algo primordial que un buen cazador no debe dejar de conocer.
Balas semiblindadas
Con la entrada de este tipo de balas, la cosa empezó a cambiar. Ante la novedad de nuevas técnicas y usos, las balas semiblindadas fueron muy cuestionadas en el pasado, sobre todo, por parte de los soldados.
Antiguamente, las semiblindadas no garantizaban la penetración perfecta, pero tenían algo que enamoraba a quienes las usaban. Para aumentar el poder de detención se crearon unas balas envueltas metálicas abiertas por la punta y por donde se introducía el plomo. Éste tenía la misión de aplastarse cuando impactaba y así abrir la camisa para que la bala se pudiera deformar y, causa de esta capacidad, aumentar la energía para que pudiera ser transferida en el disparo.
Para resolver cualquier tipo de duda sobre el tipo de balística para tu arma, o cualquier otra, puedes contactarnos en el 934874486, o bien escribiéndonos a info@ravell.es.
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